NAVIDAD
La Navidad es una
oportunidad para contemplar el gran misterio de Dios, quien, hecho hombre, viene a
salvarnos
El espíritu de la
Navidad nace en nosotros al reflexionar sobre este hecho. No dejemos que este
hermoso encuentro entre lo divino y lo humano se convierta tan solo en una festividad externa, disfrazada de
regalos y cosas superfluas que poco o nada tienen que ver con la esencia de la
Navidad.
Los adornos, la
música, las luces de colores, el árbol y el nacimiento deben servir para crear
el ambiente de oración y buscar el encuentro personal con Dios en Jesús Niño.
Lo importante es
encontrar el equilibrio entre el verdadero significado de la Navidad, acoger el
misterio de Dios con nosotros y las fiestas familiares y sociales.
En la época navideña
abundan las sonrisas, los abrazos fraternos, los buenos deseos, el ambiente de
paz y tranquilidad, porque todo eso nos trae Dios hecho Niño, Dios que se hace
hombre para humanizarnos, en la ternura de Belén.
Con inmenso cariño
FELIZ NAVIDAD